domingo, 31 de mayo de 2009

CARTAS DESDE MI CELDA III

Doctora di Forbole, quiero comentarle mi problema:

Me identificaré como "Grillín Enjaulado". Desde hace mucho tiempo tengo una curiosa afición, no la puedo controlar, es como si fuera mi destino: me cuelo en las bodas y seduzco a uno de los comensales.
Al principio todo comenzó por error. Uno de mis jefes me mandó a comprar unas telas negras por todo Madrid y por equivocación acabé en una sala de convites. Pensando que la que iba de blanco era la dependienta y que me hacía ojitos, acabé liándome nada más y nada menos que... ¡con la novia!
La cosa no acabó ahí, porque como lo pasé bien y me gustó un montón, me colé en otras bodas, y al principio seducía a las novias, luego a las damas de honor, luego a las floristas, padrinos, padres, madres, abuelas, novios, amigas envidiosas, fotógrafos, gente que entraba en el último momento porque tenía algo que decir, ramos de flores, sillas, sillones, tresillos, butacas, mecedoras, descalzadoras y todo tipo de invitados e invitadas que se pueda imaginar.

Mi pregunta es muy científica: ¿estoy bien de la chola?

Espero su respuesta con ansiedad.
Un saludo,

Grillín Enjaulado


Querido Grillín Enjaulado:

Antes de nada te pido disculpas por la tardanza...he estado algo liada con ciertos asuntillos (y también se me había olvidado por completo…jeje) ya ves, ¡¡¡el estar encerrada me está afectando más de lo que quiero!!!Pero bueno luego te cuento lo que me ha pasado. Primero resolveré tu consulta.

Sin duda alguna, las bodas tienen algo especial. Les rodea un intenso morrrbooo, esa sensación de que hay algo oculto en ellas, como si todos interpretarán un papel repartido al azar. Y luego están los trajes…¡¡¡¡o si los trajes!!! Esos trajes que no deben ser manchados por ningún tipo de postre volador. También están esos puros, esas rumbas, esa ropa interior, esos condones, esas fustas, esos brindis, esos "recuerdos" del convite, esos profesores de tango demasiado cariñosos, esos curas incastos, esas más que posibles cartas de abandono por parte de los camareros... Así que mi querido consultor, te comprendo. Y te digo que no, que no estás mal de la chola. De hecho yo también pasé por esa etapa, aunque yo no me colaba en las bodas…Aunque desde hace un tiempo se deben extraviar las invitaciones, porque no me llega ninguna, ni tampoco me avisan de reuniones familiares…que raro…Además, has experimentado algo que solemos olvidar…¡¡Los tresillos!!! Y cuando digo tresillos digo cualquier objeto inanimado. Con ellos puedes dar alas a tu imaginación. Puedes disfrutar de pasiones inhumanas. También están las flores, ay, las flores. Si las disfrutas en plena alergia encontrarás nuevos placeres, nuevas sensaciones, nuevos cosquilleos…Así que amigo mío sigue así, no te cortes, hasta puede que te copie el invento y también me empiece a colar yo en bodas jeje.

Ahora te contaré lo que me ha pasado:

Estaba disfrutando de una de mis combinaciones de ropa de abuela favoritas, cuando encontré un spray para pintarme el pelo de blanco. ¡¡¡Imagínate, por fin podía ser toda una abuela!!! Así que estaba yo ahí tocándome, cuando me apagaron las luces, pero entonces ocurrió algo increíble…¡¡¡una extraña luz verdosa iluminaba la habitación!!! No sabía de dónde provenía, pero gracias a ella pude ver algo en el techo, algo que parecía un nombre, algo que resolvería todos los misterios que me habían rodeado en los últimos años, algo que hasta entonces no había podido leer…Y que entonces tampoco pude, porque no sabía donde leñes había dejado mis gafas, así que me puse a buscarlas. Al pasar por delante del espejo del armario descubrí algo aterrador…¡¡La extraña luz brotaba de mi!!! Después de darme cuenta de que por fin mi cuerpo daba señales de aquel uranio que me bebí creyendo que era un nuevo feng-cóctel, me di cuenta que venía solo de mi pelo. Así que cogí el bote de pintura para el pelo y vi que ponía ¡¡¡fluorescente!!! Satisfecha de haber resuelto un misterio, me fui a dormir, con la extraña sensación de dejar algo sin hacer…Por la mañana, al despertarme, recordé lo del techo, pero mi pelo era normal otra vez, seguía sin encontrar mis gafas y para colmo, perdí el bote de spray…Aissss…

Así que así me he quedado, cegata perdida (me duelen los ojos de pegarme el ai-fon a la cara para poder escribir) y sin diversión de abuela superstar. Cuando las encuentre os aviso.

Saludos de mis partes: Dra. Di Forbole

domingo, 10 de mayo de 2009

CARTAS DESDE MI CELDA II

Querida Petunia Apasionada:

Uff el otro día casi me pillan...menos mal que tantos años de experiencia han desarrollado en mí un sexto sentido capaz de sentir en un radio de 1069,6969696969 m el sesapil de cualquier ser viviente (o no), y creanme, el ser que se acercaba tenía muuuuucho sesapil...oosisisiisisisisisisissi
Estos días no han estado mal...aunque por una extraña razón, cuando dan las 2 de la mañana, mis musculosos captores se ponen a cantar canciones de disney y de diversos musicales durante 1 hora, hasta que una voz de ultratumba dice que avisará al capitán Prince si no se cayan...Así que ahora estoy aprovechando que están ensayando para esta noche para contestar, por fin, a tu duda...

Ya veo que te sientes abrumada por la pérdida de tu palmera phoenix dactylifera, la cual es famosa por su enoooooorme grosor y por su tronco rugoso. Sabiendo las características de dicha palmera y que has vivido en directo su crecimiento, comprendo tu desdicha. Pero amiga mía, ya has comprobado que la hiedra es una de las mejores plantas consoladoras que existen. Poco a poco irás descubriendo que un tronco grueso y rugoso no siempre es lo mejor, y que la hiedra te ofrece más jugueteo, más flexibilidad e incluso podrás jugar con ella a distancia. Así que en esta ocasión la juguetona gana a la gruesa. En cuanto a tu variedad de pez, el cual es conocido por su preciosa aleta (te diré como curiosidad que el tamaño de su aparato reproductor en estado inactivo, es como la mitad del tamaño del susodicho pez...pero vamos, seguro que de eso no te has dado cuenta...) quizá se encuentre algo agotado. Según me has contado, su actividad es continúa y no para de jugar contigo, pero es él el que toma la iniciativa y no tú. Además con toda probabilidad te habrá visto jugar con tu nueva hiedra y eso le entristece, sintiéndose angustiado, como si se hubiera equivocado de ruta en un bosque. Querida amiga mía, a veces (y solo a veces) no puedes recibir tu sola sin dar nada a cambio. Además, en raras ocasiones, algunos seres prefieren otro tipo de actividades (como caricias y cursiladas de ese tipo...) de las que yo no comprendo bien.

Así que resumiendo te diré un par de consejos: A tu querido pez hablale con ternura y acariciale la aleta aguantando tus instintos salvajes (te aseguro que es dificil..) ya que te conviene mantenerlo contento porque tienes un tesoro bien grande en casa. Mientras tanto, y asegurándote ante todo de que el pez no se entera, disfruta de la hiedra tooddoo lo que puedas, ya que este tipo de especie no entiende de cursiladas y va DERECHO AL GRANO. Así que despeinate [haz caso a tu sabia prima Anónimo(curioso nombre...)].

Saludos de mis partes: Dra. di Forbole

Pd. cuando pueda mandaré nuevas noticias desde mi suite...

sábado, 2 de mayo de 2009

CARTAS DESDE MI CELDA I

Querida doctora di Forbole:

Soy una fiel seguidora de su consultorio , sin embargo no se vea obligada a contestarme sino lo ve oportuno, pues el solo hecho de escribirle me alivia y a la vez me reconforta al recordar historias pasadas. Soy una vieja solterona (me puede llamar Petunia Apasionada), aficionada a las mascotas y plantas, gustos que veo compartidos por sus parroquianos. Pues bien el caso que me preocupa es sobre mi " pececillo " un mollienisia velifera de la familia de los pecilios del orden de los ciprionodontiformes escitante, el cual no quisiera que siguiera la suerte de sus antecesores que nose si se debio a la pasion con las que las trate, .. como mi preciosa palmera una phoenix dactylifera (hay que dactiles tenia) de lindo fo..follaje, que disfrute durante su crecimiento y que un desgraciado desnaturalizado se digno a podar argumentando que estaba agotada... por lo que la sustituí por una hiedra imponente, que durante su crecimiento me perseguia y por la cual trepaba sintiendo sus suculentos tallos y hojas jugetonas; pues bien no le seguire aburriendo con historias pasadas como la de mi poLLo de pico rosado y hablador que dejare para otra ocasion; en fin al caso que nos ocupa . . Tengo un pez pizpireto, en mi pecera , por las mañanas esta muy travieso, y sube y baja, y al mediodia le da pellizquitos ( y que pellizquitos ..) a mis nalgas, perodón algas y por la noche...por la noche abre y cierra su alconcito ... pero desde hace unos dias le noto algo decaido y no se como llamar su atencion, sus aletitas ya no tienen movimientos delicados ¡ayyyyyyy! y su colita.. ya no palpita.

Se despide pidiendole consuelo Petunia Apasionada ...


Querida Petunia Apasionada:

Primero y ante todo quiero pedir disculpas por tardar tanto en contestar, pero desde hace un tiempo indeterminado (días, meses...no lo se con seguridad..)me encuentro aislada del mundo. Me encuentro en 1 pequeña habitación que solo contiene una gran cama redonda de agua que mide 2 metros de altura (tengo que escalar para subirme..) y 1 armario lleno de ropa de abuela. No se como he llegado hasta aquí, pero por ahora me lo estoy pasando muy bien. De verdad, ¡¡¡¡os lo aconsejo a todos!!! Es excitante estar rodeada de hombres y mujeres muscolos@s con antifaces rojos y azules. Lo único malo es que no podía acceder a mi consultorio...Pero gracias a una técnica de persuasión que me enseñó en Mantua 1 misteriosa dama que no hacía más que bailar, dar piruetas y estirar todo el rato (incluso mientras comía), y gracias a ello conseguía todos sus propósitos, he conseguido acceder al querido internet. Pues bien, estaba yo esta mañana probando una combinación de camisa de flores con pamela de paja, gafas de nadar y un bonito abrigo de visón cuando, un hombre musculoso con una enorme entrepierna y un antifaz azul, vino a visitarme, y vi que tenía un ai-fon en su mano. Así que después de superar mi instinto más primitivo (nunca me imaginé que sería capaz de contenerme de tal forma...) me dispuse a dar piruetas alrededor de él hasta que conseguí el susodicho aparato (la verdad es que me sorprendí de mi elasticidad, aunque debido al ímpetu que le puse se me rompió el pantalón...) Así que aquí estoy deseosa de contestar todas tus dudas......uy te tengo que dejar..creo que un hombre se acerca ¡¡¡¡y estoy hecha un asco!!!!Seguiré en otra ocasión.

Saludos de mis partes Dra. di Forbole