Sexualísima Dra. di Forbole:
Soy Elisa Antonia, su pupila, pero preferiría que me mantuviera en el anonimato y simplemente me llamara "la dama de la sangría". Mi problema principal es que amo a un compañero de clase, al que llamaremos R. M., y no paro de mirarle en la biblioteca, y no paro de pensar en él, pero todas las chicas de la facultad de veterinaria están detrás suya y yo, cada vez que estamos a punto de que haya tema, me desmayo irremediablemente.¿Qué me pasa? ¿Qué debo hacer?¿Acaso debo subirme a una mesita con ruedas y deslizarme mientras canto "Good morning Baltimore"? Estoy desesperada.
Suya Siempre,La Dama de la Sangría
Querida Elis....digo DAMA DE LA SANGRÍA:
Claro está que el desmayarte en las situaciones en que la cosa se empieza a poner interesante no ayuda mucho a la hora de conquistar ese corazón salvaje, sobretodo porque otras personas/animales pueden aprovechar ese momento de distracción para conquistar al susodicho. En tiempos remotos, te hubiera aconsejado que probaras la terapia que mencionas. Pero después de la descarga de furia de nuestro GRANDIOS hacia la última persona que usó el método (debido a que la lealtad que procesaba hacia el dios pagano SOBOTTA, rechazando al auténtico mesías NETTER, le impidió completar el rezo que nombras, correctamente), el método está desaconsejado. Así que lo único que te recomiendo es la utilización del método más avanzado que hay en el campo de los desmayos, el cual, tras años de experimentación en iguanas gratisianas, ha visto la luz en humanos: MÉTODO PELIX ( un complicado sistema en el que te atas un hilo en la cabeza que contacte con los pelillos de la nariz, así cada vez que tu cabeza pierda el eje, un pequeño tirón en esa zona evitará tu desmayo). Si no tiene resultado, prueba con la técnica RABADINCHA, ya casi en desuso, la cual consiste en la colocación de una malla de clavos puntiagudos en la zona de la rabadilla. Pero amiga mía, aunque te mantengas despierta, me da la corazonada que ese tal desconocido con las siglas R.M. (siglas que no me dicen nada, DAMA DE LA SANGRÍA) busca experiencias que una simple estudiante de veterinaria no puede complacer.
Saludos de mis partes: Dra. di Forbole
Soy Elisa Antonia, su pupila, pero preferiría que me mantuviera en el anonimato y simplemente me llamara "la dama de la sangría". Mi problema principal es que amo a un compañero de clase, al que llamaremos R. M., y no paro de mirarle en la biblioteca, y no paro de pensar en él, pero todas las chicas de la facultad de veterinaria están detrás suya y yo, cada vez que estamos a punto de que haya tema, me desmayo irremediablemente.¿Qué me pasa? ¿Qué debo hacer?¿Acaso debo subirme a una mesita con ruedas y deslizarme mientras canto "Good morning Baltimore"? Estoy desesperada.
Suya Siempre,La Dama de la Sangría
Querida Elis....digo DAMA DE LA SANGRÍA:
Claro está que el desmayarte en las situaciones en que la cosa se empieza a poner interesante no ayuda mucho a la hora de conquistar ese corazón salvaje, sobretodo porque otras personas/animales pueden aprovechar ese momento de distracción para conquistar al susodicho. En tiempos remotos, te hubiera aconsejado que probaras la terapia que mencionas. Pero después de la descarga de furia de nuestro GRANDIOS hacia la última persona que usó el método (debido a que la lealtad que procesaba hacia el dios pagano SOBOTTA, rechazando al auténtico mesías NETTER, le impidió completar el rezo que nombras, correctamente), el método está desaconsejado. Así que lo único que te recomiendo es la utilización del método más avanzado que hay en el campo de los desmayos, el cual, tras años de experimentación en iguanas gratisianas, ha visto la luz en humanos: MÉTODO PELIX ( un complicado sistema en el que te atas un hilo en la cabeza que contacte con los pelillos de la nariz, así cada vez que tu cabeza pierda el eje, un pequeño tirón en esa zona evitará tu desmayo). Si no tiene resultado, prueba con la técnica RABADINCHA, ya casi en desuso, la cual consiste en la colocación de una malla de clavos puntiagudos en la zona de la rabadilla. Pero amiga mía, aunque te mantengas despierta, me da la corazonada que ese tal desconocido con las siglas R.M. (siglas que no me dicen nada, DAMA DE LA SANGRÍA) busca experiencias que una simple estudiante de veterinaria no puede complacer.
Saludos de mis partes: Dra. di Forbole
Querida Dra. di Forbole, me dirijo a usted un poco apurada, debido a que tenemos un familiar que no sabe nada de la cajita, unos familiares y yo misma hemos intentando explicarselo con insinuaciones pero no hay manera, por eso nos dirijimos a usted para que nos ayude y le explique como solo usted sabe hacer todo acerca de ese tema.
ResponderEliminarmuy agradecidas y comprenda que es por el bien de muchacho